Caspe está en la situación en la que está. Necesita ganar. Es un equipo que no da el brazo a torcer nunca, que no se rinde nunca. En casa lleva muchísimos partidos sin perder. Un equipo que nos lo va a poner muy difícil, eso sin ninguna duda, y por eso no ha perdido en casa, me parece, las últimas diez jornadas.
Por otro lado, nosotros estamos en una situación que era impensable al principio. Que nos llena de ilusión, de convicción, de confianza, de que podemos conseguir los tres puntos.
Venimos en una buena racha. El último partido en Illueca no fue un buen partido nuestro, pero estamos jugando bien fuera de casa, en otros partidos hemos sacado muy buenos resultados.
Viajamos con toda la ilusión del mundo porque para nosotros seguir intentando achuchar, por lo menos, a los cuatro o cinco primeros y mantenernos ahí en la pelea es muy ilusionante. Un club tan pequeño, con las expectativas que teníamos sobre el año en Tamarite.
Como decía, un partido muy bonito y muy difícil para los dos equipos.